Inciensos Primarios

Para tener buena suerte en los negocios, es de buen augurio quemar incienso de sándalo todos los días por la mañana. Al cambiar de trabajo o domicilio, es recomendable usar incienso de iglesia ruda, mirra y siete azahares.
Para mantener paz, abundancia y buena comunicación en el hogar, se utilizan los pétalos deshidratados de tres flores blancas, se queman con carbón vegetal y se añaden unas gotas de aceite de la prosperidad. Mientras más agradable es el olor del incienso, más rápido actúa como agente purificador espiritual.

Almizcle: Este incienso al ser quemado exuda una fragancia potente y expresiva. La vibración del almizcle es física y altamente magnética. Su esencia ha sido asociada con ángeles y hadas. En la India es usado por 

sus propiedades relajantes y afrodisíacas. Además trabaja como estimulante para el cuerpo psíquico asistiendo en el desarrollo de la fuerza de voluntad y la determinación.
Ámbar: Es frecuentemente llamado " el néctar de los dioses o ambrosia ", debido a su aroma divino. Esta fragancia proviene de la naturaleza y tradicionalmente fue usada como patente medicinal para tratar numerosas enfermedades crónicas. El usuario encontrará abundantes variedades de incienso de ámbar para entonar sus propios procesos curativos. Muchas personas utilizan este incienso para atraer el verdadero amor a sus vidas.
Copal: ha sido utilizado desde hace miles de años. Se usa básicamente en ceremonias espirituales y para alejar vibraciones negativas. Actualmente se dice que al quemar el copal en su estado original, se atrae la buena suerte, especialmente en situaciones relacionadas al dinero y las finanzas. Asimismo es sumamente conocido por su acción purificadora y la fragancia que emana predispone al entusiasmo.
Jazmín: Es el más sagrado aroma de Diana, diosa de la luna llena. Su esencia imparte una alta vibración espiritual y por esta razón el jazmín es particularmente efectivo para santificar templos, hogares y santuarios. La calidad pura de este incienso ayuda a aliviar tensiones psicológicas, depresión y estrés; por lo que es utilizado para producir sentimientos de optimismo, confianza y euforia. Su emanación invoca calor y relajación del cuerpo físico. En resumen, el uso de esta fragancia especial de naturaleza espiritual, encuentra su máxima expresión creando a su alrededor ambientes de amor, seguridad y veneración.
Mirra: Es una de las fragancias sagradas que le ofrecieron los tres reyes al niño Jesús. En tiempos antiguos en Heliopolis, la mirra fue usada por los egipcios como parte de su ritual al sol. Cuando la mirra es quemada produce una alta vibración espiritual que conduce a la oración. La mirra ayuda a curar padecimientos, protege en contra de enfermedades psicológicas y atrae tranquilidad mental.
Rosa: Este incienso está regido por Venus, el planeta asociado al amor. Por tal motivo cuando se regala un ramo de rosas, sentimientos de cariño y afecto lo acompañan. Igualmente evocativa es la dulce fragancia de esta flor por el efecto que su esencia provoca en nuestra naturaleza amorosa. El uso de este incienso puede ser particularmente útil para aliviar la ira, la pesadumbre y los celos.
Sándalo: Es una de las fragancias más populares, particularmente por su cualidad de levantar el ánimo y avivar la llama de la fe. Por tal razón esta madera es considerada sagrada y es comúnmente quemada durante el proceso de una meditación profunda. El sándalo está regido por Urano y también es usado frecuentemente por aquellos que desean recordar vidas anteriores.
Canela: Es altamente medicinal y se usa como aromático y estimulante. Fue usado en Egipto y Asiria para promover curaciones y embalsamar. Al inhalarlo se dice que actúa como afrodisíaco y además predispone a la concentración y la meditación. En la actualidad es común su uso para promover el apetito y ha servido de gran ayuda para aquellas personas que padecen enfermedades relacionadas a desordenes alimenticios.
Cedro: Es una madera aromática cuyo uso se remonta a tiempos ancestrales, cuando era utilizado para edificar templos y palacios en el medio oriente, como por ejemplo el templo del rey Salomón en Jerusalén. El cedro es símbolo de poder y longevidad. Al estar regido por Júpiter se asocia con la prosperidad material y la abundancia económica. Su fragancia exquisita es usada para purificar y curar afecciones nerviosas.
Pachulí: Es ampliamente conocido como un afrodisíaco con poderes mágicos. Esta fragancia es altamente estimulante. Su potente aroma irradia sensualidad, alerta los sentidos y promueve la organización de los pensamientos, ayudando a aclarar los problemas, poniéndolos en un plano más objetivo. Cuando se inhala la esencia tiene un efecto rejuvenecedor en el cuerpo, la mente y el espíritu.
Pino: Es una esencia de naturaleza conífera, consecuentemente placentera para las divinidades. Su fragancia posee maravillosos poderes curativos, especialmente para contrarestar enfermedades de las vías respiratorias y deficiencias del corazón. También se afirma que la quema de este incienso ayuda en las transacciones comerciales.